Dichos y Refranes

DICHOS Y REFRANES DE LOS LATINOS

Al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios."
Loro viejo, no aprende a hablar..!
Tarde piaste, pajarito..!
Ni tan cerca que queme el santo, ni tan lejos que no le alumbre.
Mas vale tarde, que nunca..!
No hay mujeres feas si no hombres sobrios.
El que busca la verdad corre el riesgo de encontrarla.
La vida es una enfermedad mortal de transmisión sexual.
De la risa al duelo, un pelo.
Hijo sin dolor, madre sin amor.
Un amigo viejo vale más que cien nuevos.
A dios rogando y con el mazo dando
A buen hambre, no hay pan duro.
A caballo regalado no se le miran los dientes
A pan de quince días, hambre de tres semanas.
A persona lisonjera, no le des oreja.
A poco pan, tomar primero.
A quien amasa y cuece, muchas cosas le acontecen.
Cabras y cabritos, a todos nos traen fritos.
Cabrito ganso y lechón, de la mano al asador.
Cacarear y no poner huevos, cada día lo vemos.
Barriga llena, corazón contento.
Bobo como papel volando.
Bobo como pedo de yegua.
Bobo como perro de dos días.
Bocón como calzón de vieja.
Borregos al anochecer, charcos al amanecer.
Boticario sin botica, nada significa.
Al hombre pobre y sin plata, la cama lo mata... Y si tiene mujer, se termina de joder..
A la vaca brava se le acaricia el ternero (para conquistar una mujer con hijo, hay que ganarse primero al hijo).
Buen porte y buenos modales, abren puertas principales.
Buena es la justicia si no la doblara la malicia.
Buena fama merece quien por su patria muere.
Buenas acciones valen más que buenas razones.
Cacarear y no poner, bueno no es.
A quien has de acallar, has de halagar.
A quien mucho tememos, muerto le queremos.
Gato con guantes, no caza, pero amenaza.
Gato enfadado, araña hasta con el rabo.
Gato escaldado, del agua fría huye.
Aunque la mona vista de seda, mona se queda.
Aunque las sillas hayan cambiado, los asnos siguen siendo los mismos.
Cada chupetón de teta es un arrugón de jeta.
Cada cual echa sus cuentas, unas veces va errado y otras acierta.
Caliente como bombilla de lata.
Contra un padre no hay razón.
De hambre a nadie vi morir, de mucho comer, cien mil.
De hombres leales, están llenos los hospitales.
De inteligentes y de sabios es perdonar injurias y olvidar agravios.
De lejanas regiones, mentiras a montones.
De los olores, el pan; de los sabores, la sal.
De mujer que es madre, nadie nunca mal hable.
De nadie esperes lo que por ti mismo hacer pudieres.
El desgraciado, va a por agua al río, y encuentra el cauce vacío.
Caliente como china en baile
Caliente como negra en baile
Consejo de quien bien te quiere, escríbelo aunque no lo apruebes.
Consejo vendo, y para mí no tengo.
Contento como perro con dos colas.
Gato gordo, honra su casa.
Gato meador, llena la casa de hedor.
Golpeado como puerta de kilombo.
Golpeado como rodilla de zapatero.
El diablo sabe por diablo pero más sabe por viejo
El diablo sólo tienta a aquel con quien ya cuenta.
El dinero hace al hombre entero.
El empezar es el comienzo del acabar.
El envidioso es de tal ser, que no se le indigesta lo que come, sino lo que ve comer.
El espantajo sólo dos días engaña a los pájaros; a los tres, se cagan en él.